LOS DERECHOS Y LOS CUIDADOS
DE LOS CUIDADORES DE ANCIANOS DEPENDIENTES
Invitado: Psic. Elizeth Altamirano López
Fundación CENPROGIAP
Cuando un anciano en casa empieza a tener dificultades para realizar sus actividades de la vida diaria, o más aún, cuando estas dificultades son producto de un proceso de deterioro por una enfermedad crónica, la familia empieza a preocuparse por la necesidad de que una persona se encargue del cuidado del adulto mayor, la atención se centra en el enfermo y sus necesidades; Casi por regla esta tarea recae en una mujer, ya bien la conyugue o una hija (o nuera cuando todos los hijos son varones) o incluso una nieta; a partir de que una persona se hace cargo de otra para su cuidado, la vida del ahora cuidador o cuidadora cambia totalmente, el tiempo dedicado le impedirá tener una ocupación laboral, sus relaciones sociales pueden deteriorarse, el stress y la presión familiar son otro factor que merma la calidad de vida del cuidador, si aunado a esto la cuidadora o cuidador carece de información y de formación para realizar esta labor sus niveles de ansiedad y frustración lo llevarán a poner en riesgo su salud física y mental, en consecuencia puede llegar a perder la paciencia y tener actos de violencia o maltrato hacia su familiar dependiente.
No es un mito que los cuidadores mal cuidados duran menos que los ancianos dependientes sujetos de cuidados, son muchos los casos de mujeres ancianas que asumieron el cuidado del conyugue y estas mueren antes que el enfermo.
A diferiencia de otros paises donde sí han entendido y procurado dar protección social, económica y educativa a los familiares de ancianos dependientes, en México, las iniciativas con relación a los cuidadores han surgido de las organizaciones de la sociedad civil y de algunas instituciones educativas, y estas se han restringido exclusivamente al ámbito de la capacitación a los cuidadores y en algunos casos, muy pocos en realidad, a la conformación y organización de grupos de autoayuda de cuidadores. Esto es un gran avance si se compara con lo que existía hace 20 años, pero comparado con paises como España, en donde por ejemplo el cuidador familar, recibe apoyo físico, material y económico dentro del marco de una legislación que lo proteje y reconoce su labor como un aporte para el estado, y el estado mismo se reconoce como el responsable de brindar la protección social de sus viejos, la comparación es grosera y abismal.
El gobierno Méxicano se encuentra en estado de omisión al no generar iniciativas de ley y políticas públicas que den protección social y económica, así como el reconocimento a los derechos de los cuidadores de ancianos, ya que desde hace algunos años se comprometió en foros internacionales a asumir estos compromisos.
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