lunes, 25 de mayo de 2009

Programa 21 del 23 de mayo de 2009

La Pensión Ciudadana Universal para Adultos Mayores de 70 años en el D. F.

Invitado: Lic. Ricardo Gallardo Hernández
De la segunda generación de Derechos Universales, los derechos económicos toman mayor relevancia en la etapa de la vejez, cuando la capacidad productiva decae y los ingresos económicos se reducen. La pensión universal no contributiva en la Ciudad de México es el derecho más anhelado por los ancianos de la capital del país, y ha sido también el más criticado por la oposición política, fue calificado por el gobierno de derecha (pan) como "populista", sin embargo ese mismo gobierno a intentado copiar ese programa en una parodia llamada "70 y mas", el cual en contraste con el primero resulta un programa excluyente, focalizado, manipulado y mucho más costoso en su operación.

La pensión alimentaria para Adultos Mayores en el Distrito Federal, cumple ya 8 años de operación, y marca un parte aguas en la implementación de las políticas públicas para las personas de edad en México y en la Región Latinoamericana. Al tratarse de un programa universal el beneficio llega a todos los mayores de 70 años sin exclusión de ningún tipo, reduce sustancialmente el gasto de su operación y establece equidad de un derecho por demás justo y humano. Por primera vez en su vida cerca del 30 % de los derechohabientes de este programa, reciben un ingreso propio, 6 de cada 10 ancianos beneficiados son mujeres, para uno de cada cuatro personas que reciben la pensión esta es su único ingreso, y para el 90 % es su principal fuente de abasto de alimentos.
Es importante mencionar que este derecho se convirtió en Ley a partir del año 2003, lo que da certidumbre y seguridad a los adultos mayores de seguir recibiendo este derecho al margen de los cambios políticos y de administración; a partir del mes de septiembre del presente año este derecho será extensivo para personas mayores de 68 años, este beneficio económico es operado a través de una tarjeta electrónica aceptada en pequeños y grandes comercios de la Ciudad de México, y en la cual cada día primero de mes se deposita lo equivalente al 50% de un salario mínimo, actualmente este monto asciende a $822.00 mensuales. La operación de este programa representa menos del 3.5 % del presupuesto anual del Gobierno del Distrito Federal y no representa una sangría ni es fuente de endeudamiento, por el contrario es un detonante de consumo y de movimiento económico en la gran ciudad, ya que son más 432,000 derecho habientes que mes con mes mueven a través de este programa más de $355, 000,000.00 en consumo directo.

Este programa es ya un ejemplo a nivel Latinoamericano y son varios los países de la región que estudian su viabilidad, la hermana nación de Bolivia ha puesto en marcha un programa que tiene como referencia al de la capital Mexicana, vinculandolo directamente con la renta petrolera; Chile, Brasil, Paraguay y Costa Rica son algunos países que ya han puesto en marcha proyectos de esta naturaleza. Sin embargo es en nuestro propio país donde la ideología conservadora en el poder, no tiene la sensibilidad humana ni mucho menos la voluntad política para implementar este programa y esta Ley a nivel nacional.

Desde hace dos años el programa de Pensión Alimentaria para Adultos Mayores es operado por el Instituto para la Atención de los Adultos Mayores del Distrito Federal y es la plataforma para implementar programas y políticas públicas complementarias para este sector de población, ejemplo de ello es el program de salud, que se basa en brigadas médicas de visita domiciliaria en zonas marginadas para ancianos dependientes, así como el servicio médico y la adquisición de medicamentos totalmente gratuitos para todos los mayores de 70 años.
Haz contacto con el IAAMDF ad_mayor@df.gob.mx

domingo, 17 de mayo de 2009

Programa 20 del 16 de mayo del 2009

SERVICIOS GERONTOLÓGICOS II
Invitados: Dr. Psic. Pablo Picardi Marassa, Universidad Iberoamericana
LCC. Claudia Tiscareño Martínez, CARE 60
Psic. Gustavo Loreto Sierra, Cuidados Integrales para Mayores
La transición demográfica esta cambiando el rostro de la sociedad; el envejecimiento poblacional requiere de nuevas formas de atención y necesita de nuevos servicios.
En esta ocasión conoceremos tres opciones de servicios para adultos mayores en la Ciudad de México, en el ámbito de la educación y el desarrollo humano la Universidad Iberoamericana Campus Santa Fe, organiza a lo lago del año diversas actividades académicas de formación, capacitación y actualización sobre temas relacionados a la vejez, en particular temas de salud, nutrición y derechos humanos, en esta ocasión en particular invitan al público a la Jornada 10 Hábitos Efectivos para la Salud del Adulto Mayor, el día 27 de mayo en el Auditorio Sánchez Villaseñor, a partir de las 10 de la mañana, la entrada es libre, participan en esta jornada coordinada por el departamento de salud de la UIA, el Instituto Nacional de Ciencias Medicas y Nutrición "Salvador Zubiran" y el Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores.
La empresa privada CARE 60 incursiona como pionera en el servicio de teleasistencia para los adultos mayores, tomando como antecedente el exito que este tipo de servicios han tenido en los paises mas envejecidos, caso particular el de España. Brindan atención médica y acompañamiento emocional a distancia, respuesta inmediata en caso de emergencia médica y acompañamiento personal en tramites o gestiones, así como servicios personales en el hogar (corte de pelo, podolgía, etc.), también ofrecen servicios de asesoría y seminarios para empresas y personas en el tema de la jubilación. El servicio de Teleasistencia es un servicio sobre todo útil para los mayores que viven solos o que viviendo acompañados padecen de alguna perdida funcional, este servicio le puede proporcionar confianza y seguridad al adulto mayor, al tiempo que brinda tranquilidad y apoyo a sus familiares.
Uno de los servicios más demandados actualmente es el de atención y cuidados para adultos mayores dependientes, ya bien con déficit funcional por perdidas en el área física o más recurrente por deterioro cognitivo (alzheimer, parkinson, EVC), la atención y los cuidados que un anciano dependiente requiere, llevan aparte del conocimiento técnico y la eficacia en el trato humano y digno, un doble riesgo: Por un lado el deterioro de la salud física, mental y emocional(burn out) del cuidador, que regularmente suele ser una mujer también adulta mayor, y por otra parte el riesgo que al carecer de los conocimientos o bien por el propio desgaste del cuidador, el anciano pueda sufrir de maltrato y violencia. Cuidados Integrales para Adultos Mayores brinda atención especializada con personal capacitado para atender y cuidar en el hogar a ancianos, el servicio integral empieza al aplicar una valoración gerontológica al anciano y a su entorno, para a partir de ahí elegir el perfil del cuidador, ya que el programa de cuidados varía de acuerdo con la patología del anciano; durante el tiempo de atención se realizan supervisiones periódicas y evaluaciones al desempeño del cuidador y al estado de salud del adulto mayor.

lunes, 11 de mayo de 2009

Programa 19 del 09 de mayo de 2009

LA SEGURIDAD DE LOS MAYORES: HACIA UNA CULTURA DE PREVENCIÓN

Invitado: Lic. Adolfo Miranda Castillo

El sociedad actual vive una gran crisis de inseguridad; muchos son los factores que influyen en este fenómeno; y muchas las víctimas de ello, ¿son los adultos mayores un grupo social con mayor riesgo? ¿Cómo prevenir situaciones de riesgo? ¿Cómo puede incorporar un anciano sus experiencias a favor de la prevención? Bajo estas preguntas surgen reflexiones y recomendaciones para construir un cultura de prevención entre los adultos mayores.

La fuente y origen de la violencia social que se vive actualmente en México y que genera una creciente sensación de inseguridad, es la desigualdad económica, la falta de empleo y de oportunidades para el desarrollo; en esta perspectiva no se vislumbran cambios sustanciales que cambien esta realidad de pobreza y desigualdades sociales; ante este triste panoráma parece que tendremos que seguir conviviendo bajo esta realidad: Menos empleo más delincuencia.

Otra realidad es que los ancianos se van colocando en diferentes niveles de vulnerabilidad, conforme la conjugación de varios factores; la perdida o disminución de capacidades físicas y mentales, ya bien por el proceso normal y consecuencia de alguna patología, la disminución de contactos sociales, pero sobre todo el aislamiento y la soledad: Soledad es vulnerabilidad.

Como prevenir riesgos de ser víctima de algún abuso o delito?

Debemos tomar algunas medidas que inhiban a los delicuentes, pensemos que los delincuentes pueden elegir a los adultos mayores como víctimas fáciles, o situaciones en donde puedan actuar rápido y fácil, de ahí que las acciones que tomemos deberán ir en el sentido de disuadir al delincuente al hacerle ver que la situación no es tan sencilla como creían. Si es posible los adultos mayores deben vivir en compañia de otras personas, pero si no es así deben aplicar las siguientes medidas: Mantener siempre cerrados sus hogares con chapas y cerraduras funcionales, con protecciones en ventanas y mantener una buena iluminación exterior, contar con un medio de comunicación (teléfono, celular o radio comunicador) y un directorio de familiares, vecinos, amigos e instituciones de seguridad y auxilio (policía, cruz roja, bomberos, etc.); y por sobre todo mantener una vida vecinal y comunitaria activa, así como una red social de apoyo. Siempre que personas lleguén a ofrecer productos o servicios a su hogar, no debe permitirles el paso, si es un servicio contratado verifique la identidad del empleado y de la compañia que contrató, no permita su acceso al interior de su hogar si no esta seguro, no deje copias de sus llaves debajo de macetas o tapetes, parece mito pero aún muchas personas lo hacen.

Al salir de compras y al cobrar sus pensiones deben procurar hacerlo en compañia de otras personas, hacerlo en horarios y en lugares con presencia de elementos de seguridad pública; en el transporte público o en la calle no haga ostentación de joyas, tarjetas o posesión de dinero; si ya se es víctima de un asalto, no se oponga ni trate de evitarlo, no se exponga innecesariamente a ser lastimado, recuerde que lo más valioso es la vida.

Por otra parte no debemos olvidar la capacidad de comunicación, la disposición de mayor tiempo libre y la experiencia vivencial de los adultos mayores, para construir una cultura de prevención contra la inseguridad en sus familias, en calles, barrios y colonias; los adultos mayores pueden jugar un papel protagónico en este ámbito social, ya bien organizando comités o grupos de trabajo con vecinos, como promotores sociales de la prevención en escuelas, en iglesias o en centros comunitarios, o bien como vigilantes y observadores de su entorno, que puedan detectar cambios en el vecindario que indiquen riesgos de inseguridad.

Trabaja en tus relaciones personales, recuerda que la principal acción preventiva es no quedarte solo.

sábado, 2 de mayo de 2009

Programa 18 del 02 de mayo de 2009

HIPERTENSIÓN ARTERIAL SISTÉMICA I



Invitado: Dr. Amir Gómez León Mandujano

El proceso de transición demográfica que vive México y los países de la región, trae consigo otro proceso de dimensiones y efectos impredecibles: La transición epidemiológica, son ahora tiempos de las enfermedades crónico degenerativas de entre ellas sobresale la hipertensión arterial, con el más alto índice de prevalencia en la población: 18 millones de mexicanos la padecen.

La Hipertensión Arterial Sistémica (HAS) es en este momento el problema de salud pública no epidémico más importante que atender, ya que por una parte tiene un alarmante crecimiento entre la población, del periodo 1993 a 2000 crecio de 26.6% al 30 %, de la población con más de 20 años de edad; y por otro lado es la enfermedad que causa la más alta tasa de morbilidad y mortalidad, en consecuencia es también la carga económica más pesada para el sistema de salud.

La HAS suele presentarse entre los 25 y los 55 años de edad, con una diferencia por género: En las mujeres se presenta generalmente depués de la menopausia al disminuir sus niveles hormonales, ya que estos actúan como protectores ante la HAS.

El aumento de la presión sanguinea en el sistema circulatorio puede producir algunas personas síntomas que anuncian su presencia, pero para la mayoría la HAS es asintomática, de ahí parte de su peligrosidad ya que podemos adquirirla, convivir con ella durante largo tiempo y no saberlo hasta que ya se ha producido un daño o una complicación producto de la HAS.

Por ello es recomendable hacer tomas de presión con regularidad: normal 120-80, media 130-85, alta 140-90 o más.

Y tan importante como saber nuestro nivel de HAS, es conocer cuales son los factores que propician que esta se eleve más allá de lo normal, y adecuar o corregir algunos hábitos de vida que son la principal causa, en principio la forma de comer, el exceso en el consumo de carbohidratos, grasas de origen animal y sodio, con un pobre consumo de frutas y vegetales frescos; el sedentarismo crónico, la falta de actividad física regular tiene varias consecuencias: No hay consumo de calorías y estas se acumulan en forma de grasa provocando obesidad, se pierde elasticidad y fuerza en el sistema músculo-esquelético y en consecuencia en el sistema circulatorio y respiratorio; el consumo de tabaco y el stress emocional son dos factores de la vida moderna que potencian de manera muy importante la aparición y sobre todo el desarrollo de HAS; y sin duda también existe el factor genético, la herencia familiar no podemos evitarla, pero el conocer la historia clínica familiar nos puede ayudar a prevenir y evitar sumar los otros factores de riesgo.

Debemos también tener cuidado en el consumo de ciertos fármacos que pueden provocar la elevación de la HAS, como es el caso de algunos antigripales.

Algo muy importante de reconocer es que la HAS no es una enfermedad de la tercera edad, en la mayoría de los casos se adquirió antes de llegar a esta etapa de la vida, sin embargo es en esta etapa cuando los daños acumulados en los diferentes organos diana, por los años de padecerla pasan la factura: Derrames cerebrales, infartos, insuficiencia renal, entre otros.
La HAS es un enfermedad crónica, degenerativa y discapacitante, esto es importante saberlo, pero es todavía más importante saber que es una enfermedad prevenible y en todo caso controlable.